El mantenimiento es una herramienta fundamental para el buen funcionamiento de cualquier empresa ya que repercute directamente en su proceso productivo. Efectuar un mantenimiento adecuado en tiempo y forma de las instalaciones, infraestructuras, maquinarias, vehículos, dispositivos, equipos, o componentes, ayuda a prevenir problemas que podrían surgir debido a un mantenimiento inadecuado. Tradicionalmente se ha venido realizando una combinación entre un Mantenimiento Programado (MP), que efectúa las operaciones de mantenimiento en base a unos procedimientos diseñados habitualmente por el fabricante, junto con un Mantenimiento Reactivo (MR), (a veces denominado correctivo), que se lleva a cabo ante un fallo inesperado. Este modelo de mantenimiento tradicional no permite abordar adecuadamente la problemática real, ya que un porcentaje considerable de fallos se deben a causas y condiciones no contempladas por el fabricante, o a las condiciones específicas que impone el entono en que se opera. Es por ello que surge la necesidad de evolucionar a modelos de mantenimiento particularizados para la empresa y sus activos, que tengan en cuenta las condiciones reales de operación y funcionamiento de estos, que aprendan de la experiencia, se anticipen al fallo, y prescriban actuaciones a modo de recomendadores inteligentes.
En este sentido ha surgido en los últimos años el denominado Mantenimiento Inteligente (MI) mediante la incorporación de las Tecnologías 4.0 (Inteligencia Artificial, Big Data, Gemelo Digital, Realidad Aumentada e Internet de las cosas – IoT, principalmente) a los procesos de mantenimiento, evolucionando estos hacia un modelo proactivo con un ciclo de vida de 5 etapas que incorporan estas tecnologías (descripción –> prevención –> diagnóstico –> predicción –> prescripción), y que permiten una mejora en la operatividad y eficiencia, contribuyendo a reducir costes y aumentar la confiabilidad de los equipos, promoviendo un entorno de trabajo más seguro y eficiente. Este ciclo de vida se ha venido desarrollando con el objeto de responder a objetivos de negocio, siendo la sostenibilidad un factor presente pero no esencial ni como objetivo de los mismos.
Es importante señalar que, en la práctica, este tipo de mantenimiento (MI) requiere un diseño ad-hoc para cada caso concreto, dado que cada infraestructura o equipo es diferente, tiene sus propios datos, y opera de forma diferente en base a las condiciones de operación que tiene en la empresa. Los sistemas de MI se desarrollan utilizando modelos algorítmicos a partir de técnicas de Inteligencia artificial que aprenden a partir de la información y los datos de operativas de mantenimiento pasadas, junto con datos en tiempo real entorno en que se opera, en concurrencia con dispositivos IoT que permiten la obtención de dichos datos. En un nivel superior, un sistema de MI (visto como plataforma tecnológica) permite dirigir y optimizar los procesos de mantenimiento, y por tanto los modelos algorítmicos subyacentes, en aras del cumplimiento de los requerimientos en forma de KPIs que la empresa establezca, y que independientemente del sector son, por lo general, KPIs de negocio relativos a la productividad, eficiencia o el ROI. Así, las plataformas, sistemas y algoritmia subyacente existente en materia de MI se centra en la consecución de una mejora en estos KPIs tradicionales, no en la sostenibilidad.
Por otro lado, la sostenibilidad hace referencia a la capacidad de satisfacer las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para satisfacer sus propias necesidades. Esto implica un equilibrio entre el crecimiento económico, el bienestar social y la protección del medio ambiente. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), aprobados en 2015 en la Asamblea General de la ONU y cuya ejecución está comprometida por los países firmantes, establecen una hoja de ruta clara e inequívoca para lograr un futuro sostenible a nivel global.
En este contexto, las empresas, entre las que se incluyen las enmarcadas en la industria Aeronáutica y Aeroespacial, han iniciado en los últimos años una transición en su gestión, estrategias y operaciones encaminada a abordar la nueva realidad que impone inexorablemente la Sostenibilidad. En este sentido, se ha producido la incorporación en todas las empresas de KPIs de negocio orientados a la sostenibilidad y, por tanto, también se han empezado a introducir estos como uno de los objetivos a cubrir por parte de los sistemas de MI, en lo que se ha dado en llamar el Mantenimiento Inteligente Sostenible (MIS), que no son mas que sistemas de MI como los descritos anteriormente en los que se establecen KPIs de sostenibilidad a modo de umbrales a cumplir (habitualmente por cuestiones normativas), pero que no son objeto prioritario de la optimización de la algoritmia inteligente desarrollada, que sigue centrada en KPIs de negocio tradicionales, por lo que no es posible operar con estos sistema de MI si se desea poner el foco en el mantenimiento dirigido hacia la sostenibilidad. En términos tecnológicos, se solapa con la aparición de la conocida Industria 5.0, que pone foco en el valor social y el bienestar, intentando equilibrar el desarrollo económico con la resolución de problemas sociales y medioambientales, mediante la la aparición de las denominadas Tecnologías 5.0, que suponen una potenciación de algunas tecnologías 4.0 (IoT, Gemelo Digital), y la extensión de la Inteligencia Artificial hacia un enfoque centrado en las personas (Chatbots, Auditoría de IA, sesgos, privacidad, explicabilidad de modelos, etcétera).
De esta forma, el escenario actual es que las pocas aproximaciones prácticas existentes de MI, no permitan diseñar procesos de mantenimiento avanzado para empresas que requieran poner el foco exclusivamente, de forma prioritaria, o con un peso que pueda ser variado en función de la estrategia empresarial, en la sostenibilidad, como es el caso de aquellas que desarrollan su actividad en el ámbito medioambiental o bien su actividad tenga un alto impacto, como es el caso de la Salud, la Movilidad, el Transporte, o las propias Administraciones Públicas (AA.PP.). Por tato, se requiere un cambio de paradigma que conlleva desarrollos de plataformas, sistemas, procesos, y modelos algorítmicos específicos para obtener un mantenimiento inteligente de utilidad para estas empresas que desean poner el foco en la sostenibilidad.
Es en este contexto en el que las empresas plantean esta necesidad, tras haber constatado la misma de forma interna, así como haber recogido esta opinión por parte de sus clientes. De forma que se introduce el concepto de sistemas de mantenimiento corporativos inteligentes, centrados en la sostenibilidad, dando forma al Mantenimiento Corporativo Sostenible e Inteligente, con el objeto de lograr un mantenimiento inteligente centrado en la sostenibilidad mediante tecnologías 4.0/5.0, especialmente diseñado para empresas que necesitan poner el foco en el ámbito de la gestión de procesos de mantenimiento relativos a la mejora de la sostenibilidad. Esto les permitirá de forma transversal llevar a cabo un mantenimiento integral centrado en la sostenibilidad les permitirá poner foco en la reducción de la huella ambiental negativa en sentido amplio, y de manera particular, en función de la empresa, en aspectos relativos a la reducción de residuos, el ahorro de energía, la reducción de emisiones y consumos, la prolongación de la vida útil de los activos, o la optimización de los recursos, por citar algunos ejemplos.